Genji esperó paciente en la sala de espera, donde aguardaba nuevas de su adversario. No le había gustado nada como le habían tratado en el tatami, seguramente, a él también le habrían hecho lo mismo, y, si bien es verdad, que lo más seguro es que le dejarían tirado allí, él no lo haría. No era como ellos.
Junto con el otro chico. Se puso en pie al ver salir al doctor.
-¿Es vuestro amigo? No es nada grave, es solo una lesión, se recuperará en un mes o dos. Hasta entonces nada de peleas ni de ejercicio.
Avisó el medico. El asintió.
-¿Puedo verlo?
-No veo porqué no.
Acto seguido, el artista marcial pasó lentamente hacia la habitación, sin saber la reacción del chico.
Junto con el otro chico. Se puso en pie al ver salir al doctor.
-¿Es vuestro amigo? No es nada grave, es solo una lesión, se recuperará en un mes o dos. Hasta entonces nada de peleas ni de ejercicio.
Avisó el medico. El asintió.
-¿Puedo verlo?
-No veo porqué no.
Acto seguido, el artista marcial pasó lentamente hacia la habitación, sin saber la reacción del chico.